Donde residen las estrellas

Las estrellas son de las composiciones más interesantes del universo. Ellas nacen de apenas una pequeña chispa que se expande en cuestión de microsegundos hasta formar algo colosal, hermoso y único. Durante su existencia generan grandes cantidades de energía, luz y vida. Al morir, lo hacen de forma magistral, un tanto aterradora, pero aun así muy interesante; se transforman en gigantes ondas de energía, para luego absorber todo lo que la rodea en un gigantesco, atrayente e inevitable agujero negro. El corazón humano se comporta de forma similar: él, es la pequeña gran chispa de nuestra vida, allí se alojan los sentimientos; el amor, el dolor, la alegría, la tristeza, la bondad, la esperanza, la rabia y gran parte de la esencia que nos hacer ser quienes somos. Durante la vida, el corazón recibe, purifica y bombea nuestra sangre por todo el cuerpo. Al dejar de latir, provoca que  todo el cuerpo deje de funcionar, arrastrando de esta forma la vida con él. Todos los corazones, a pesar de cumplir las mismas funciones, son únicos porque cada uno siente y se expresa de forma irrepetible y con distinta intensidad. Las estrellas, de cierta forma, también actúan así, porque generan ondas de energía únicas, irrepetibles y con distintas frecuencias. Las estrellas tienen una misma composición, pero no así un mismo ciclo de vida.

Hay estrellas grandes, pequeñas, medianas, unas más frías y otras más calientes, no todas tienen el mismo color, ni la misma intensidad, pero si una misma finalidad; dar vida y guiar a sus respectivos mundos alrededor de ellas. Nuestros corazones no tienen el mismo tamaño, ni el mismo peso, unos están mas saludables que otros, algunos sufren menos o más que otros, pero todos cumplen la misma función: mantenernos con vida, hacernos sentir y guiarnos a través del mundo.

Te pido una cosa: nunca te avergüences de tu estrella, porque aún cuando a veces te hace sufrir, comete equivocaciones y puede proyectarse con poca intensidad, también da la luz, la energía y las fuerzas que necesita tu mundo para seguir existiendo dentro de este vasto e irrepetible universo.

Escrito por: Dorian Cartagena